Los objetivos a futuro que orientan la meta de la satisfacción del cliente son: 

• La radical comprensión que el edificio y la infraestructura es un activo (asset) líquido que necesita mantener su valor económico en el mercado.
• Que un contrato de colaboración o alianza público privado necesita de control fiable del mantenimiento durante la amortización del equipamiento, determinar el valor real de reposición y de una ardua gestión que conquiste las metas y objetivos sociales que se propuso el promotor, además de una adecuada gestión de los riesgos en fase de diseño y ejecución
• La eficiencia energética certificable es un problema de nuestra sociedad, en Europa y en el mundo; y que por lo tanto, nuestros edificios e infraestructuras deben ser sostenibles.
• El Building Information Modelling BIM es un instrumento básico en manos del Project Management y del Promotror para hacer más eficiente el proceso, la inversión y el asset final. BIM significará en los próximos años un cambio cultural radical en la colaboración de las partes durante todo el ciclo de vida del edificio y la infraestructura; el modelo paramétrico exige cambios en la gestión de procesos. Los cambios deben ser absorbidos, educados y perfeccionados.
• La formación es la tarea continua en los distintos niveles de la organización que cumplirá su finalidad con un adecuado seguimiento del equipo consultor; el cambio de hábito basado en el conocimiento es insuficiente, porque el proyecto es el vehículo que introduce el verdadero cambio y contribuye a la sostenibilidad en la sociedad donde el edificio y la i infraestructura presta su servicio.

AEDIP también mantiene un constante compromiso por la calidad de los servicios profesionales y una actitud vigilante a los efectos perniciosos del mercado como son las ofertas anormalmente bajas y las conductas discriminatorias que puedan entrar en coalisión con los principios de concurrencia, publicidad y transparencia en los que se debe fundamentar cualquier mercado sano: el precio de los honorarios profesionales debe ser justo en el marco de una economía de mercado donde es la oferta y la demanda la que establece el alcance y el precio que necesitan nuestro clientes. Sin embargo, existen fuerzas destructivas del mercado como son los precios predatorios, las presencia de actores poco cualificados que ponen en riesgo el buen nombre de la profesión, condiciones de contratación exorbitantes, confusión entre profesionales autónomos y empresas de servicios, ayudas estatales de países competidores que pueden situar a nuestra empresas en situación de desventaja competitiva, etc. En estos temas cruciales, la AEDIP brega por condiciones de contratación y precio justos.

La síntesis de nuestra acciones no es otra que de converger con la necesidades de nuestros asociados y los demás actores de la sociedad a los que nos debemos, para alcanzar un alto grado de satisfacción mediante respuestas acertadas y una actitud de firme de liderazgo que nos proyecte de forma constante hacia el mejor futuro.